Preparados científicos cubanos ante mayor demanda de productos contra COVID-19

El Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB), en la capital, tiene las potencialidades para garantizar una mayor producción de los candidatos vacunales, satisfacer la demanda de medicamentos destinados al tratamiento de pacientes positivos de la COVID-19 y dar respuesta a las solicitudes internacionales, aseguró Oscar Cruz Gutiérrez, su subdirector de producción.

En exclusiva a la Agencia Cubana de Noticias el también Máster en Ciencias dijo que la pandemia significó un reto para la institución y la dirección del Grupo de las Industrias Biotecnológica y Farmaucética de Cuba (BioCubaFarma), porque las limitaciones financieras son complejas.

El bloqueo impacta fuertemente al sector de la biotecnología, se trata de productos de alto valor agregado, con elevados estándares regulatorios y las materias primas proceden por lo general de Estados Unidos, Canadá y Europa, de ahí que su obtención resultó cada vez más difícil ante las continuas restricciones de la administración anterior de Washington, agregó.

No obstante, el investigador precisó que con los años se ha ganado experiencia en la preparación de un grupo grande de especialistas, necesaria no solo para la obtención de los productos biotecnológicos y la formación del capital humano, sino también en la generación de ideas y alternativas que permitan trazar estrategias con vistas a mantener la vitalidad de la industria.

Al respecto, la Doctora en Ciencias Odalys Ruiz Hernández, directora de desarrollo tecnológico del CIGB, señaló que desde el comienzo de la pandemia evaluaron aquellos renglones registrados por la institución en aras de utilizarlos en el enfrentamiento al virus.


Contábamos con algunas biomoléculas en fase de ensayos clínicos como es Jusvinza (CIGB 258), que se adaptó para combatir la enfermedad, también se mejoraron los procesos en diversos fármacos y se realizaron cambios de formulación, comentó.


La especialista explicó que uno de esos casos fue el Nasalferón, logrado a partir de la modificación del Interferon alfa 2b humano recombinante para ser administrado de forma nasal.


En cuanto a los candidatos vacunales Mambisa y Abdala, dijo que fueron estudiados teniendo en cuenta las referencias internacionales y la experiencia del centro con plataformas tecnológicas.

Destacó que el trabajo conjunto con otras entidades de BioCubaFarma y varias áreas del centro posibilitó acortar los tiempos de producción, además de la labor en equipo de los trabajadores y en especial del personal joven.

Al referirse a otras innovaciones del CIGB en el combate a la pandemia, el subdirector de producción explicó que el Heberón (Interferón alfa 2b humano recombinante) fue uno de los primeros medicamentos utilizados al ser un agente antiviral por excelencia.

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