Continúa persecución política en Bolivia

Varios exfuncionarios del gobierno de Evo Morales continúan presos en Bolivia en el contexto de la judicialización de la política o lawfare llevada a cabo por las autoridades golpistas.

Entre ellos están en cárceles con denuncias sin pruebas, Gustavo Torrico quien en este momento se encuentra hospitalizado debido a un aneurisma aórtico; el exministro de Gobierno Carlos Romero y César Cocarico exministro de Desarrollo Rural y Tierras.

Otros extitulares bolivianos como Juan Ramón Quintana (Presidencia), Vilma Alanoca (Culturas) y Javier Zabaleta (Defensa) están refugiados desde noviembre en la residencia diplomática de México en La Paz.

En una conversación con el Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (CELAG), el exvicepresidente Álvaro García Linera, refugiado en Argentina, aseguró que el lawfare es un fenómeno creciente en el mundo, y particularmente en la región latinoamericana.

Hasta la fecha no hay ninguna investigación abierta sobre los más de 29 asesinatos a bala y 400 heridos en el contexto de la asonada golpista, recalcó.

Sin embargo, la justicia en Bolivia ha devenido una oficina operativa del Ministerio de Gobierno que distribuye acusaciones según la ideología que profesan las personas, explicó.

En su opinión, ser exmiembro del anterior ejecutivo es una garantía para que los golpistas anuncien su cacería.

García Linera señaló que si el gobierno golpista ha estado dispuesto a asesinar impunemente, no tiene ningún reparo moral en encarcelar ilegalmente

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *