Antonia Luisa Cabal Salis: una vida dedicada a los pantagramas

Guantánamo.- Hace diez años falleció en Guantánamo Antonia Luisa Cabal Salis (Tootsie), pianista, pedagoga, investigadora y directora de coros. La econocida maestra de generaciones de músicos guantanameros, dijo adiós a la vida, pero dejó una huella imborrable en la cultura cubana,.

Graduada de de Musicología en la Universidad de Oriente, la vida de Tootsie está directamente ligada a un pentagrama y a siete notas musicales. La pianista, pedagoga y directora de coros, comenzó su vida laboral en una academia infantil, hasta que en Guantánamo se abrió la escuela de arte Luis A. Carbó, donde fue directora y laboró hasta 1980.

Tootsie, considerada la madre de los músicos guantanameros, fue una mujer de mirada severa y muy exigente en su trabajo, aunque siempre estaba rodeada de niños y jóvenes, con los que asumió proyectos en aras de enriquecer y continuar elevando el arte y la cultura en Guantánamo.

Creadora del primer coro masculino en Cuba, el Coro Vocecitas de Cristal, el coro Voz Tempo y el coro mixto, posee entre sus méritos el haber fundado la enseñanza artística en la provincia, los festivales de música infantil Vocecitas de Cristal y la jornada de concierto Pepe Gallart.

De esta hornada de coros fundados por Tootsie, no solo salieron buenos músicos sino también arquitectos, médicos, doctores, estomatólogos, periodistas… quienes, aunque no se dedicaron a la música, jamás olvidaron a quien, desde su rigurosa exigencia y perseverancia, les enseñó desde sus clases a apreciar la música, pero sobre todo, a ser mejores.

La destacada músico y pedagoga ostenta cuantiosos reconocimientos y distinciones, entre ellas la Orden por la Cultura Nacional, el Premio Nacional de Cultura Comunitaria, la medalla Alejo Carpentier, el Premio EGREM y el Cemí, símbolo de la provincia de Guantánamo.

El Premio Nacional de Cultura Comunitaria, la Medalla por la Cultura Nacional Alejo Carpentier, la Orden Raúl Gómez García, el Guamo, el Puntero de oro, el Premio Los zapaticos de rosa, de la Organización de Pioneros José Martí; el Caracol de la UNEAC, fueron algunos de los reconocimientos recibiodos por esta incansable luchadora por la Cultura…

También le fue entregado el Cemí y la Fama, símbolos de la provincia y la ciudad de Guantánamo, respectivamente, y el Maestro de Juventudes, de la Asociación Hermanos Saíz.

Ha pasado diez años y recordamos a Antonia Luisa Cabal por que nos legó su mayor premio: el respeto y la dmiración de muchos que, aunque tomaron otros derroteros fuera de la música, la acompañaron hasta el último aliento.

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